Hay palabras que son tan grandes que no sabemos lo que significan. Nombres propios que han de entenderse también o incluso en primer lugar como símbolos. Sintetizar, separar, abandonar el miedo. Es necesario no tener ningún apoyo, permanecer en la soledad, en la duda, en la interrogación. Habré encontrado, creer haber encontrado, volver a hacer un cuadro idéntico a los anteriores, explotar un filón, fabricar, en suma, es sin duda más cómodo que buscar continuamente, y sin embargo esa luz que a veces se alcanza, no la guardamos en el bolsillo. La perdemos en el instante mismo. Es necesario lanzarse de nuevo en su búsqueda para seguir sorprendiéndonos y emocionarnos.


